El Costo de Estudiar

No dejo de asombrarme toda vez que alguien cuenta que entró a estudiar una carrera sin saber de qué se trataba y peor aún, sin siquiera saber si le gustaba o no.

Mientras algunos se juegan el futuro y el de sus familias a la hora de elegir una carrera, para otros es como echar a rodar un par de dados y, si tienen suerte, puede que le achunten medio a medio y terminen estudiando algo que finalmente les gusta y acomoda, o definitivamente puede que obtengan un muy mal juego y, luego de acumular inasistencias y ramos reprobados, terminan desertando. Pero estos azarosos estudiantes, ¿se habrán preguntado alguna vez cuánto le cuesta a sus padres estos años de estudio?

Si hicieramos el ejercicio de calcular el costo de manutención anual de un estudiante de una carrera standard (matrícula y mensualidad), más los costos asociados como transporte, alimentación, internet, celular, entre otros, podríamos llegar a cifras por sobre los 3,5 millones de pesos, y pienso que me estoy quedando corta. Si consideraramos el valor de carreras más caras como diseño, arquitectura, medicina, los costos pueden incluso superar los 5 millones, dependiendo por supuesto de la casa de estudios escogida, y en el caso de las primeras, los materiales de trabajo.

Sumando y sumando... sale bastante “conveniente” la gracia de estudiar “lo que más me tinca” ¿o no? Si estos mismos estudiantes tuviesen que pagarse su carrera, ¿habrían hecho la misma elección o lo habrían pensado más?

De frente y en buena

Decir las cosas de frente y "en buena" es fundamental para poder mantener buenas relaciones en un grupo social, o de trabajo (sobre todo en este último). El asunto es cómo decirlo y cuándo decirlo.

¿Les ha ocurrido alguna vez que les llega un email y al leerlo la sensación que les queda es de desagrado... como un "qué se cree este tal por cual" o "qué me habrá querido decir"? A mi me sucedió más de alguna vez, y muchas de ellas era sólo rollo mío... la cosa es que hace años decidí hacerle frente a este tipo de "eventos cotidianos" y aclararlos lo más pronto posible para no acumular dudas, porque es como que a uno le queda "sangre en el ojo" llegando incluso a tener desenlaces fatales... jajajajaja... Puede resultar sencillo decirlo, pero no siempre es fácil hacerlo, sobre todo cuando estamos tratando de comunicar algo que nos molesta. Sin embargo, puedo decir que en mi experiencia, lo mejor es conversar el asunto, sin malos tratos ni exaltaciones, simplemente comentar "en buena" lo que pensamos a la persona en cuestión y aclarar esas "dudas" que generalmente lo que hacen es provocar desgaste en las relaciones.
Evitemos el "conventilleo", el pelambre y empecemos a generar un diálogo constructivo que contribuya al mejoramiento de la comunicación en nuestro circulo social.
Por último, quisiera decir que si estás dispuesto a decir las cosas de frente, también debes estar dispuesto a que otros te las digan a ti. Aprender a escuchar y, sobre todo, reflexionar sobre lo que te digan, incluso puede ser más difícil que lo anterior.

Pánico

Mientras más se adentraba en el bosque, más intranquilo se sentía. Caminaba con paso inseguro pero rápido, tropezando de vez en cuando y cada cierto tiempo mirando hacia atrás como si alguien o algo estuviera trás él.

El viento movía el follaje en la oscuridad de una noche sin luna. El ulular de un búho se colaba en el ambiente. Estaba cansado, sentía frío pero no podía dejar de andar. Presa del pánico continuaba internándose en el tétrico bosque alumbrándose con una linterna de bolsillo.

Se detuvo en un claro y recorrió con la vista los alrededores. Entre los arbustos divisó una pequeña cabaña aparentemente abandonada. Forzando apenas la cerradura logró entrar, cerró la puerta y la apuntaló con una vieja silla. Se sentía a salvo.

En el centro de la cabaña había una mesa enpolvada y un par de sillas, un poco más allá una antigua cocina con una pila de leños al costado, y a su izquierda, una cama deshecha. Encendió los leños y se sentó junto al fuego para sacudirse el frío. Aún estaba asustado, pero al menos se encontraba en un lugar más seguro. Sus ojos comenzaron a cerrarse, el cansancio y el sueño eran más fuertes que él.

Un estruendo lo despertó.
Una colosal figura se abría paso con violencia y se abalanzaba sobre él.
Un golpe seco.

Lo último que oyó fue esa risa demencial, irónica que lo acosó durante mucho tiempo en sus peores pesadillas, donde caminaba con paso inseguro pero rápido, tropezando de vez en cuando y cada cierto tiempo mirando hacia atrás como si alguien o algo estuviera tras él.

Educadores v/s Educandos: Un Paseo por la "Universidad"

Hace dos años decidí volver a estudiar, pero en la noche. Digo volver porque ya obtuve un título universitario hace algunos años y hoy voy por un segundo cartón.

En estos pocos años la cosa no ha cambiado mucho. Todavía encontramos alumnos de todo tipo, profesores para todos los gustos y las clásicas luchas de poder entre los mandamases siguen existiendo. Lo que sí ha cambiado es que hoy todo es multimedial. Todo se hace a través de internet, sólo falta que podamos dar pruebas a través de una web… eso sería genial… jejejeje

La Intranet Académica: una genial idea pero que no siempre funciona.
El Datashow: uso y abuso.
Cursos B-Learning: todo un Fiasco.
Encuestas On-line de evaluación docente: ¿sirven para algo?.

La Intranet Académica: una genial idea pero que no siempre funciona.
Cada alumno matriculado tiene acceso a una intranet donde cargan los ramos que tiene ese semestre. Ahí se publica material de apoyo para dichos ramos que cada profesor va publicando a medida que transcurre el curso. Además cuenta con un webmail, herramientas de distinto tipo (diccionario, calculadora, buscadores, etc), puede revisar sus notas, entre muchas otras cosas.
¿Dónde está el problema? El problema está en que la intranet o esta caída, o no puedes entrar, o se borraron los contenidos por culpa del nuevo periquito a cargo de su mantención ... en fin, es lo que hay…

El Datashow: uso y abuso.
Últimamente las directivas de las carreras se han obsesionado con el uso del Data. Me imagino que todo es a raíz de las famosas encuestas de evaluación docente (que no sirven para nada y que en realidad es tema para largo…veré si lo planteo en otra ocasión). El asunto es que existen profesores que basan la clase en el famoso Data pasando del uso ocasional al abuso.
¿Te imaginas de noche, en una sala a obscuras, un profesor con el tono de voz bastante monótono? Acomodas la mochila sobre la mesa, luego la cabeza sobre la mochila y así ni te enteraste de que ocurrió en la clase hasta que alguien te “zangolotea” para decirte que está terminando la hora.

Cursos B-Learning: todo un Fiasco.
Este tema lo trataré muy superficialmente, pues esto si que da para análisis. Solo voy a plantear la situación:
Al menos un semestre al año estamos teniendo un curso que la mitad del tiempo es presencial y la otra mitad es B-Learning. Es decir, vamos 3 semanas a clases y 3 semanas en un chat. Por ejemplo:
Materia: CONTABILIDAD DE COSTOS Y PRESUPUESTOS.
Curso: aproximadamente 30 periquitos, quizá más.
Sede Virtual: Chat de Asignatura. Una pantalla donde a la derecha aparecen personas conectadas y a la izquierda los mensajes.
Cómo funciona:
En la intranet académica, a la hora que tenemos la clase, se ingresa a un Chat para la asignatura.
El profesor actúa como moderador y los alumnos preguntan respecto de las guías previamente publicadas.
¿Se imaginan a muchos alumnos conectados en un chat intentando seguir una clase donde todos “hablan” o preguntan al mismo tiempo?…suponiendo que tengamos la suerte de que sean alumnos aplicados y que estén al pendiente de lo que dice el profesor y no de organizar el carrete de más tarde.

Encuesta On-line de evaluación docente: sirven para algo.
Todos los semestres molestan con el mismo tema: la famosa e inútil evaluación docente. Entiendo que la idea, para los que dirigen estos centros educativos, ha de ser muy importante. A mi juicio, no sirven para nada, considero que es un instrumento poco adecuado para medir cómo el profesor imparte una materia.
Por ejemplo... Hubo un semestre donde tuvimos un profesor de matemáticas, demasiado bonachón, pero no cachaba nada... nada de nada... al punto que cuando resolvía ejercicios en el pizarrón, solía dejarlos a medias porque no sabía como terminarlos. ¡TOING!. Se enviaron cartas a nombre del curso completo exponiendo la situación, se hizo la evaluación docente donde se intento dejar en claro que el profe no salvaba a nadie... y que creen? EL SEMESTRE SIGUIENTE ESTABA HACIENDO CLASES DE CÁLCULO...!!

Bueno, qué les puedo decir, no todo es tan malo como lo pinto aquí. El café no es tan caro, por $300 te tomas un mocaccino, pero ojalá que no te salga aguado… En verano por una módica suma los que se “echan” ramos pueden recuperar y así no se atrasan el siguiente semestre… Puedes jugar en el taca-taca medio desvencijado siempre y cuando traigas tu pelota y, date con una roca en los dientes de que no tienes que traer a los jugadores… jejejejeje. Para jugar a la pelota de a de veras, hay una cancha de baby, con arco y todo… En cuanto a lo tecnológico, las salas de computación están bien implementadas, tienen buenos equipos… ahora, que tengan lo que tu necesites, es otro tema….

Cuando Soñar Todavía Era Útil

"Cuando Soñar Todavía Era Útil”, ese era el título de un libro que se encontraba en una de las tantas estanterías de mi casa y, curiosamente, no recuerdo de que se trataba, menos del autor, sólo recuerdo ese título que magistralmente cuenta su propio cuento y que de cierto modo, me provocó en incontables ocasiones, reflexionar respecto de este asunto.

Los sueños, para mí, son un alimento diario, lo que me motiva a seguir luchando para conseguirlos. Y es que debe ser bien triste pasar por la vida sin tener al menos un sueño, una meta que cumplir.

Momento Cero, nace de un conjunto de sueños que, paso a paso, ha ido pavimentando sus propios senderos. Junto a otros soñadores nos hemos enfrentado a muchísimos obstáculos e innumerables satisfacciones. Pero la lucha continúa, y pase lo que pase, seguiremos trabajando para que este sueño perdure en el tiempo y se convierta en parte de los sueños de otras generaciones.

Hoy sé que en veinte años más voy a mirar atrás y sabré que al menos uno de mis sueños lo pude concretar, porque soñar todavía es útil.

Por último, quisiera invitarlos a reflexionar respecto de cuáles son sus sueños, aquellos que parecen calar hondo en el corazón y que a veces, por las noches, no los dejan dormir pensando en cómo llevarlos a cabo. Esos sueños que no deben morir consumidos por la cotidianeidad.

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